En todo el planeta, se vive una creciente demanda de profesionales Universitarios por cursar maestrías en educación. ¿ Por qué profesionales de muchas áreas optan por realizar una maestría o doctorado en Educación?
En varios países de América Latina no existe mucho interés por parte de los jóvenes en cursar programas de pregrado orientados a la carrera docente:
En Colombia solo el 8% de los matriculados en programas profesionales cursan alguna licenciatura en Colombia. En comparación, la tercera parte de los estudiantes de pregrados cursan programas asociados a la Economía, administración, contaduría y afines y otra cuarta parte en programas asociados a las ingenierías.
Esta información está basada en el último reporte del Sistema Nacional de Información de la Educación Superior SNIES.
El caso Chileno es aún más interesante: En el último proceso de admisión, las carreras pedagógicas sufrieron un descenso del 27% de la matrícula frente al año anterior. Esta crisis de aspirantes al magisterio chileno viene generando profundas discusiones en torno a flexibilizar los requisitos de admisión a programas de formación de docentes.
Caso México
En México, también existe una profunda preocupación por el considerable descenso en que muchos jóvenes quieran estudiar para convertirse en maestros.
Del ciclo escolar 2013-2014 al 2018-2019, la matrícula de las carreras del campo de la formación docente se desplomó 20%, al pasar de 184 mil 883 a 147 mil 694 alumnos.
De acuerdo con los Indicadores Nacionales de la Mejora Continua de la Educación en México 2020, publicados por la Comisión Nacional para la Mejora Continua de la Educación (Mejoredu), la contracción de la matrícula se concentró, principalmente, en las unidades de y subsedes de la Universidad Pedagógica Nacional (UPN), donde se redujo prácticamente a la mitad (45.6%) en sus carreras de docencia. Le siguieron las escuelas normales, con una disminución de 30.4% de su matrícula.
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Aumentan las matrículas para estudiar Maestrías en Educación.
Pero mientras los gobiernos de Chile y México se preocupan por los descensos en la matrícula universitaria para cursar programas conducentes a ingresar a la carrera docente, en casi toda Hispanoamérica se disparan las matrículas por maestrías y doctorados en Educación.
Caso particular vive la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) el curso 2020-2021 ha empezado con treinta plazas más en el máster de formación del profesorado de Educación secundaria obligatoria y bachillerato, formación profesional y enseñanza de idiomas. Sin embargo, este aumento en la oferta no ha sido suficiente para satisfacer la demanda. Las solicitudes se han incrementado en más de 1.000, un 120% más, hasta las 1.959.
En el caso Colombiano, no tan actualizado con sus cifras en matrículas en educación superior, se revela que en el año 2019 ,el 30% de los estudiantes matriculados en programas de posgrado cursan alguna maestría en educación.
Para el año 2019 solo la Universidad de Santander UDES, registró más de 12.000 estudiantes cursando las maestrías Gestión de la Tecnología Educativa y Tecnologías digitales aplicadas a la educación. Siendo de paso, la Institución Universitaria con más estudiantes matriculados en un programa de maestría.
¿Por qué hay más profesionales estudiando maestría en educación?
La docencia será una de las profesiones más demandadas en 2021, tal y como revela un estudio realizado por la IMF Institución Académica. En él, y tras analizar el mercado laboral después del confinamiento, ha enumerado las cinco profesiones que más oportunidades tendrán en el mercado laboral durante el próximo año.
Otra gran razón para cursar maestrías en educación es la aspiración de muchos profesionales a conseguir estabilidad laboral con el estado y la oportunidad de obtener un trabajo que permita disfrutar de un poco de flexibilidad en los horarios y turnos laborales.
En Colombia, se están presentando más de 50 o hasta 200 personas por una vacante a las plazas para nombramiento provisional en el Sistema Maestro. (ver sistema maestro)
También es el caso Español. Distintas comunidades autónomas han anunciado que en primavera y verano tendrán la necesidad de reforzar la contratación de profesores a causa de la pandemia.
Un pregrado o título de maestro no es suficiente
Buscar la estabilidad laboral en plena crisis del mercado laboral es el objetivo de muchas de las personas que optan por opositar. En España, los profesores de secundaria, después de estudiar un grado, deben estudiar este máster para poder acceder a las plazas públicas.
Salvo excepciones, ya que durante la crisis del coronavirus algunas comunidades se han planteado contratar a personas que no hayan realizado este tipo de estudios. Con todo, varios medios han publicado que, igual que en la anterior crisis, estudiar una oposición se ha convertido en una opción para muchas personas sin trabajo.
En Colombia para aplicar a las vacantes del Sistema Maestro o nombramiento por concurso docente, uno de los criterios de calificación con mayor puntaje es la formación posgradual.
También, muchos profesionales encuentran en la docencia un campo de desarrollo profesional y fuente de ingresos adicionales.
Son muchos los casos en los que los docentes universitarios tienen otro empleo formal y la dedicación al sector educativo sirve para incrementar su saldo a favor.
“La necesidad de evolucionar el aprendizaje académico y la formación profesional obliga a tener más y mejores docentes, y como consecuencia de ello, formarse como profesor se ha convertido en una de las “carreras” más atractivas del panorama actual”, justifica David López, director de Adecco Learning & Consulting.
“Una de las ventajas que tienen estos másteres es que hay un porcentaje muy alto de encontrar trabajo enseguida, existen casos que nada más terminar les han llamado para cubrir bajas, como por ejemplo ingenieros y filólogos. Este sector encuentra empleo fácilmente porque no hay profesores suficientes en estos ámbitos.
Esto también explica porque muchos profesionales de las ingenierías y medicina optan por cursar alguna maestría en educación.